Las orejas aladas es un problema frecuente que empieza a afectar desde la niñez hasta edades bastante avanzadas, más allá de la adolescencia.
Muchas veces los niños son llevados a la consulta por sus padres porque están incómodos por su problema en el colegio.
La cirugía en general se recomienda que sea realizada idealmente antes de la edad escolar para evitar problemas con los compañeros y que se convierta en un problema mayor.
De todas maneras la cirugía puede ser realizada sin inconvenientes en pacientes adultos, con un resultado igualmente adecuado.
La deformidad puede estar dada por alteraciones en distintas partes de la oreja, tanto en el hélix (borde) como en la concha, o una mezcla de ambas.
La cirugía consiste en restaurar la anatomía normal, la cicatriz queda oculta por detrás de la oreja y es imperceptible a simple vista. Las complicaciones son mínimas y el resultado es inmediato.